jueves, 26 de febrero de 2015

Vergüenza

Vergüenza. Vergüenza es lo que he sentido estos días al entrar en la oficina y que todos lo compañeros me pregunten que es lo que pasa con los Toros. Vergüenza, porque más de uno se ha interesado por éste loco mundo, con los pases que simulaba con un plano A3 por muleta, saliendo de la 'cara'  de la impresora. Vergüenza porque, me he jactado de contar en los desayunos la grandeza del toreo, su verdad, su rito.
He intentado explicar que todo lo que sucede en el ruedo tiene un porqué. Me he detenido en su belleza y sobre todo he intentado transmitir su pasión. La fuerza arrebatadora que se cuela en tu alma y que hizo que desde que viste aquella faena ya nada fuera igual.
He sentido vergüenza, porque no quería contar como entre unos y otros están acabando con la Fiesta. No quería contar que la Maestranza tiene unos empresarios que no están a la altura. No sabía explicar como figuras del toreo, sobradas de valor, no tienen huevos de hacer las cosas pensando en las consecuencias para los demás. Desde el primero en anunciarse a destiempo, Manzanares, hasta el último en decir groseramente que no se acartelaba, Morante. Realmente mi vergüenza torera, no me permitía explicar como la prensa sevillana entraba a hacerle el juego a la empresa por un mísero pase de prensa, que carecerá de valor pues no habrá nada que ver, sin hablar con las dos partes.
Ahora que han pasado unos días, el desconsuelo me templa. Barcelona empezó a caer por una pésima gestión que echó a los aficionados de la plaza y Sevilla, si cae Sevilla... La incompetencia de unos y otros ya es manifiesta.
La empresa como parte activa en este conflicto, carece de la pasión que sobra en los tendidos que regentan. Y las malas formas que gastan son algo más que comentarios de taberna, las cuales incendiaron la mecha de cuya última bomba acaba de explotar. Si bien, han pedido disculpas a los toreros por sus comentarios y prácticas, en toda negociación se ha de estar dispuesto a ceder una parte, aunque la soberbia no te lo permita. Una empresa que ni el año pasado supo darle cabida a toreros como Diego Urdiales o Curro Díaz dice mucho. Se han tenido que ver en otro desplante para poder ofrecerle la alternativa a tres jóvenes promesas (Garrido, Jiménez y Lama) que ya saben lo que es salir a hombros por la Puerta del Príncipe. De verdad, por vergüenza torera, esa que les ha faltado en todo esto, les sirva la experiencia para poner cariño en la manera que hacen las cosas y otro gallo nos cantará a la maltrecha afición.
La otra parte,  los cinco, están legitimados en sus peticiones, respeto, buen trato, consideración laboral... Ahora bien, desde mi opinión en este conflicto he echado en falta un poco más de miras a medio plazo. ¿Que será de la afición del Sur con otra Feria como la anterior? ¿Es el enfrentamiento directo la mejor arma contra una institución que permanece inmóvil desde siglos? El articulo que publicaba Paco Aguado en altoromexico.com era revelador. Remoraba el pleito de Joselito con la Maestranza a consecuencia de su idea de acercar los toros a toda la sociedad de la época con su plaza Monumental, y Joselito todavía en 2015, noventa y cinco años después de su muerte en Talavera sigue sin un monumento en Sevilla.
No sé como acabará esto. Si digo la verdad,  todo esto cada vez me va dando me es más indiferente. A veces pienso que no merece la pena. Porque estos pleitos no dependen de todos aquellos que ven soluciones en todas partes y que nunca dejarán que las propongan. Porque esto al que le hace daño es al que tenía ilusión en regalarle una entrada a sus padres para que fueran a los toros. Porque estos gestos solo echan de las plazas a esa pandilla de chavales que quería pegarse el vacile de ver a las figuras del toreo en un marco único antes de irse a la Feria. Porque esta Feria llevarse al ligue a los toros para impresionar será un trance soporífero. Porque más de uno, cuya afición y cartera estaba bajo mínimos, va tocar en retirada. Me da pena y me da vergüenza.
Solo espero que la vergüenza torera que les ha faltado a todos, la derrochen Lama, los Jiménez, Garrido, Urdiales, Fórtes, Moral y todos los que acaben anunciados en esta Feria de Abril para que aquellos cuya pasión les sigue llevando a la plaza se sientan reconfortados y puedan entrar en su oficina o trabajo con la cara alta, porque su triunfo también será el de ellos.